Debido a las dificultades económicas existentes desde el colapso financiero de 2008, muchos países en desarrollo necesitan encauzar 1,5% más del producto interno bruto al logro de los objetivos de desarrollo del Milenio (ODM), se argumenta en un informe de las Naciones Unidas publicado el 16 de septiembre. Pero el apoyo de los donantes, pese a que ha aumentado marcadamente desde que en el año 2000 se lanzaron los ODM, no se acerca de todas maneras a las metas acordadas.
“Este informe lanza un reto a la comunidad internacional y a los demás interesados directos para que intensifiquen sus esfuerzos a fin de aprovechar el potencial de la alianza mundial para el desarrollo”, dijo Ban Ki-moon, Secretario General de las Naciones Unidas, quien presentó en Nueva York el informe del Grupo de Tareas de las Naciones Unidas sobre el desfase en el logro de los ODM.
“Es mucho lo que está en juego, pero son también muchas las recompensas”, añadió por ejemplo, el hecho de que las negociaciones de la Ronda de Doha llegaran a un punto muerto ha frustrado las oportunidades de avanzar rápidamente mediante el comercio, medio tradicional por el que las naciones salen de la pobreza, dice el informe. Los acuerdos alcanzados en la conferencia de las Naciones Unidas celebrada en 2011 sobre los 48 países menos adelantados (Estambul) para acelerar las medidas de apertura de los mercados y creación de capacidad ofrecen una alternativa esperanzadora, especialmente teniendo en cuenta que, desde 2004, no ha mejorado sustancialmente el acceso de las exportaciones de los países menos adelantados a los mercados.
En el informe de las Naciones Unidas se hace también una advertencia en contra del proteccionismo commercial en respuesta al lento crecimiento económico, como medida contraproducente, que también castigaría a los países pobres.
La asistencia oficial para el desarrollo (ODA) de los donantes tradicionales se ha duplicado con creces desde 2000, hasta alcanzar la cifra sin precedentes de 129.000 millones de dólares en 2010. Pero el total correspondiente a 2010 todavía está por debajo de los compromisos contraídos en 2005 en 21.000 millones de dólares en la Cumbre del G8 celebrada en Gleneagles, concluye el informe, y es menos de la mitad del total necesario para cumplir la meta de larga data del 0,7% del ingreso nacional bruto de los donantes tradicionales.
La finalidad del objetivo de desarrollo del Milenio 8, que abarca las modalidades de la alianza internacional, es crear un entorno propicio para la erradicación de la pobreza mediante un sistema comercial justo y abierto, el aumento sustancial de la asistencia para el desarrollo, el alivio de la deuda para los países pobres y mejores condiciones de acceso de los países en desarrollo a las medicinas y a la tecnología. (Las metas 1 a 7 se dirigen a combatir el hambre, la extrema pobreza, enfermedades, la degradación ambiental y obstáculos al adelanto de la mujer y al logro de la enseñanza primaria universal.)
La eliminación de la carga de la deuda insostenible de muchos países pobres es otro de los aspectos, en que ha mejorado el entorno internacional desde 2000. Pero la reciente inestabilidad financiera ha causado cierta recaída. El informe hace referencia a que el Fondo Monetario Internacional ha detectado 19 países en desarrollo que están o presentan alto riesgo de estar en situación de agobio por la deuda, entre ellos ocho que anteriormente se beneficiaron del alivio de la deuda.
Se incorporan nuevos donantes y asociados comerciales
Parte de la atonía en la prestación de apoyo internacional ha sido asumido por los países en desarrollo, en particular las dinámicas economías emergentes.
En 2008, la intensidad de la cooperación “Sur-Sur” habían alcanzado ya los 15 mil millones de dólares, un 78% de aumento durante un período de dos años, y la cifra sigue aumentando. La proporción de las exportaciones de los países menos adelantados hacia los países en desarrollo aumentó al 49% en 2009, frente a 45% en 2006, y China, por ejemplo, prometió que no se aplicarían tarifas a un mayor número de productos importados de los países menos adelantados, así como seguir cancelando la deuda.
También están cobrando importancia los medios innovadores de recaudar recursos para financiar el desarrollo, como son las donaciones voluntarias de uno o dos dólares por cada boleto de avión adquirido. En el informe se señala que, no obstante, es imprescindible y urgente que los donantes tradicionales incrementen sus promesas de contribuciones. Incluso antes del colapso financiero de los últimos meses, los miembros del Comité de Ayuda al Desarrollo de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) congelaron los presupuestos de la AOD para que aumentaran solo un modesto 2% anual en los próximos tres años, frente a 8% durante el trienio anterior.
Los países pobres procuran lograr las metas de los ODM sobre el terreno
El Secretario General está instando también a los países en desarrollo a que intensifiquen sus esfuerzos en la campaña para alcanzar las metas de los ODM en el plazo previsto en 2015.
En un informe aparte pero relacionado, preparado para el período de sesiones de septiembre de la Asamblea General de las Naciones Unidas (documento A/66/126), el Secretario General analiza las medidas adoptadas por los países en desarrollo que han sido el sostén de un progreso sustancial aunque desigual en la consecución de objetivos, que son clave para seguir logrando beneficios.
Las políticas macroeconómicas tienen que apoyar la creación de empleos, así como el crecimiento económico, dice el informe sobre “aceleración del logro de los objetivos de desarrollo del Milenio”. Aprovechar el potencial de la agricultura y del sector rural es fundamental para el adelanto en los países de bajos ingresos, y todos los países en desarrollo deberían de explorar nuevas formas para asegurar el desarrollo sostenible y hacer frente a las condiciones ambientales. El Secretario General hace hincapié también en una mayor cobertura de los programas de seguridad social, una mayor aplicación de un marco que cubra los derechos humanos y la igualdad de género para el logro de los ODM, y en la buena gobernanza.
Para abordar la necesidad de eliminar el vacío en el acceso general y asequible a las medicinas (se dispone de medicinas esenciales en solo 42% de los centros de salud del sector público de los países en desarrollo, según el informe del Grupo de Tareas), países como la India han tenido la iniciativa de producir medicinas genéricas de bajo costo. “El caso de la India es un ejemplo de cómo la política de propiedad intelectual se puede utilizar para aumentar el acceso a medicinas asequibles contra el VIH en los países en desarrollo”, dice el informe de las Naciones Unidas. “La industria farmacéutica india está orientada fundamentalmente a las exportaciones y, al aprovechar el período de transición, se convirtió en uno de los principales proveedores de medicinas genéricas y de antirretrovirales de bajo costo para los países en desarrollo”.
El informe fue redactado por el Grupo de Tareas del Secretario General sobre el desfase en el logro de los ODM, que reúne a más de 20 organismos de las Naciones Unidas, el Fondo Monetario Internacional, la OCDE, el Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio. En la Cumbre del Milenio, celebrada en 2000, los dirigentes mundiales se comprometieron a “crear, tanto en el plano nacional como mundial, un entorno que favorezca el desarrollo y la eliminación de la pobreza”. En la Cumbre sobre los ODM celebrada en septiembre de 2010, los dirigentes mundiales se comprometieron nuevamente a fomentar una alianza mundial para “mantener las promesas”. Cuando solo quedan cuatro años para que se cumpla el plazo fijado, el informe recuerda a los dirigentes mundiales que es la “hora de cumplir”.
Fuente: Noticias PNUD